Cuidados gatos, toda la información sobre cuidados, alimentación y atención veterinaria para tu gato..
Introducción gatos
Los gatos son junto a los perros la mascota más frecuente en los hogares españoles a día de hoy. Son animales con un carácter especial, muy curiosos y con instinto cazador. Al contrario de lo que sucede con el perro, el gato es más independiente, elegirá los momentos que considere oportunos para mantener contacto social con quienes conviven con él.
Son animales nocturnos por eso a veces los gatos se muestran más activos de noche mientras dormimos. Esto es un resquicio de sus antepasados salvajes que cazaban de noche.
Los gatos disponen de un amplio repertorio de señales a través de las que nos comunican sus mensajes. Aprender a conocer e interpretar correctamente su lenguaje permitirá que sepamos en cada momento lo que el animal nos intenta decir. Ello facilitará la convivencia, disminuirá el riesgo de la aparición de problemas, y prevendrá accidentes. Su carácter no lo determina la raza.
La tenencia de estos animales conlleva una serie de gastos de alimentación o sanitarios que debemos asumir como propietarios.
La vacunación es más que recomendable sobre todo en algunos ejemplares.
La identificación mediante microchip es fundamental e imprescindible para la localización de los propietarios en caso de extravío del animal. Es muy frecuente encontrar gatos “caseros” en los centros de recogida tras haberse “escapado” de casa o caído desde ventanas y balcones sin identificación, por lo que regresar a sus hogares resulta una tarea casi imposible.
En la Comunidad de Madrid es obligatorio que los perros y gatos estén identificados mediante la implantación de un microchip a partir de los 3 meses de edad.
Cuando adquirimos un gato con microchip es responsabilidad del propietario realizar los trámites necesarios sobre la titularidad del animal, cambio de propietario o actualización de datos de contacto para lo que deberá dirigirse a su veterinario de confianza para dicha tramitación. No se gestiona online ni telefónicamente.
Cuidados gatos: Tu primer cachorro
Preparativos previa llegada a casa
Antes de la llegada de nuestra mascota a casa debemos decidir qué es lo que el cachorro va a poder hacer y qué no (dormir en las camas, subirse a la encimera de la cocina …) y mantener siempre las mismas reglas, para no desconcertar al animal.
Revisar y tapar huecos donde pudiera meterse el animal como bajos de armario, electrodomésticos … y quedar atrapado.
Retirar elementos peligrosos como objetos punzantes, tijeras, productos de limpieza.
Cuidado con algunas plantas ornamentales que resultan tóxicas si las consumen o lamen como los potos, la flor de pascua, los lirios, laurel, aloe vera, acebo, muérdago, azaleas…
Prepara una habitación tranquila y poco transitada y coloca allí todas sus cosas antes de que llegue el animal: un comedero, un bebedero, una bandeja de arena, un rascador, varios escondites, una camita y algunos juguetes.
Hay que respetar cierta distancia entre algunos de estos objetos:
- La bandeja de arena debería estar lo más alejado posible de la zona de alimentación y de descanso (p.ej. en los lados opuestos de la habitación)
- El bebedero mejor que esté un poco separado del comedero: aunque se vendan comederos con bebederos incorporados, los gatos beben más si el bebedero está aparte.
La llegada a casa
Cuando llegamos a casa con el gato, le llevaremos a su habitación y allí dejaremos que el gato decida cuando salir del transportín a explorar. No le forzaremos nunca salir, ya que es normal que el animal se sintiera inseguro y desconcertado al llegar a casa. Algunos gatos saldrán enseguida y se pondrán a explorar; otros buscarán un escondite para relajarse antes de empezar la exploración. Las cajas de cartón son escondites perfectos.
Una vez en casa debemos vigilar:
- Que come y bebe con normalidad y que su estado de actividad es el apropiado para su edad.
- Las deposiciones. Aunque en los primeros días sean blandas debido a los cambios de dieta, poco a poco deber volver a la normalidad y no desembocar en diarrea.
- La aparición de otros posibles síntomas (tos, vómitos, mocos o legañas, por ejemplo).
Si aparece cualquier problema de este tipo, llévele a su veterinario.
Debemos tener precaución si vamos a introducir un gato nuevo donde ya vivía otro. Los gatos son territoriales. Les cuesta aceptar otro animal nuevo y las presentaciones deben ser progresivas y sin forzar el contacto entre los animales.
Como hemos dicho, son animales muy curiosos y les encanta el sol por lo que no es raro verlos junto a las ventanas, por lo que debemos tener precaución y no dejarlas abiertas para evitar caídas accidentales. Podemos colocar una zona de descanso próximo a las ventanas donde poder disfrutar de los rayos de sol (cuidado en verano).
Es importante proporcionarle un ambiente didáctico donde pueda ejercitar sus músculos subiendo y bajando alturas.
Necesitan disponer de rascadores, idealmente de distintas alturas donde poder arañar e impregnar su olor.
Cuidados gatos: Alimentación
Los gatos son carnívoros estrictos por lo que su dieta de adulto requiere de altos contenidos de proteína. Son cazadores, por eso su comida debería estar puesta a su disposición todo el día, ellos están preparados para cazar y administrarse su propia comida. Además, necesitan practicar juegos de caza a diario. En términos generales los gatos comen muchas veces al día, pequeñas cantidades. Nosotros sólo debemos intervenir en casos concretos por ejemplo, obesidad y siempre bajo la supervisión veterinaria.
La dieta más apropiada para cualquier animal de compañía es un alimento seco comercial adecuado para su edad y condición física.
Nuestra propia comida o la comida casera que podamos cocinar expresamente para ellos muy probablemente presentarán carencias e incluso pueden provocarles trastornos digestivos.
Acostúmbrale a consumir exclusivamente su alimento, evitando suministrarle de forma continuada “regalitos” (“golosinas”, porciones de nuestra comida, etc.) desequilibraran su dieta y pueden conducir a la obesidad, además del riesgo de que su gato se vuelva caprichoso con la comida.
Si en cualquier caso desea hacerle un obsequio, utilice los premios especialmente formulados que encontrará en las clínicas veterinarias o tiendas especializadas
Recuerde que su gato necesitará un abundante suministro de agua fresca y limpia siempre a su disposición, especialmente si su alimentación está basada en el consumo de pienso seco. Esto le ayudará a prevenir problemas urinarios. Disponga de varios bebederos por la casa, evitando colocarlos junto a la comida, o si es así, evitando que sea este la única fuente disponible. Para aumentar la ingestión de líquidos, algunos expertos recomiendan suministrar a los gatos alimento húmedo al menos una vez por semana.
Los gatitos deberían mantenerse con su madre hasta las 8 semanas de edad realizando un destete progresivo hasta esa edad. A partir de entonces su alimentación debería ser a base de alimento húmedo y pienso. Cuando adquirimos un gato debemos seguir con la misma alimentación que tenía anteriormente. Si deseamos cambiar de marca realizar un cambio transicional durante al menos una semana.
Hasta los nueve a doce meses de edad han de alimentarse con comida de crecimiento. Podemos encontrarla tanto en forma enlatada como en forma de pienso seco. Existen preparados comerciales para cachorros de gato perfectamente formulados.
¿Qué no le puedo dar?
- Leche y productos lácteos, les producen trastornos digestivos.
- Alimentos salados, embutidos.
- Chocolate, cebolla, ajo, aguacate.
- Frutos secos.
- Uvas y pasas.
- Espinas de pescado.
- Hígado. No es malo dar un poco de hígado de vez en cuando. Pero muchas veces, gatos que han sido alimentados exclusivamente con hígado desarrollan trastornos óseos severos.
- Pienso de perro. No pasa nada porque un gato accidentalmente haya comido pienso de perro, pero tendremos problemas si alimentamos a un gato regularmente con pienso para perros ya que las necesidades nutricionales de ambos son distintas.
- NO abusaremos del atún ni del jamón york, ya que son alimentos que les encantan pero que pueden generar trastornos nutricionales.
Cuidados gatos: Higinie
Los gatos dedican una buena porción de su tiempo a acicalarse, por lo que no serán necesarios los baños o limpiezas por nuestra parte, salvo que esté excepcionalmente sucio.
Si su gato es de pelo corto, cepíllale diariamente durante la época de cambio de pelo.
Si es de pelo largo, este cuidado deberá mantenerse de forma continua durante todo el año.
Los suplementos alimenticios a base de pasta de malta ayudarán a evitar las bolas que se pueden formar en el estómago de su gato por la ingestión de pelo durante sus sesiones de acicalado. También hay piensos especialmente formulados para disminuir la formación de estas bolas.
Un exceso de acicalamiento por parte de su gato puede ser síntoma de incomodidad. Si sospecha que esto sucede, consulte a su veterinario.
La bandeja de deposiciones será utilizada de forma natural por su gato si se encuentra en un lugar tranquilo, lejos del comedero, es suficientemente amplia, fácilmente accesible, la capa de arena es lo bastante gruesa y se mantiene limpia. A muchos gatos no les gustan las bandejas cubiertas, tenga esto en cuenta a la hora de elegir la suya.
Si tiene varios gatos, no será suficiente con una bandeja para las deposiciones. Deberá proporcionarles un número suficiente de ellas y colocarlas en ubicaciones alejadas, para que ninguno se sienta incómodo por la presencia de otro gato cuando desee ir a hacer “sus cosas”.
Se recomienda Nº bandejas = nº gatos + 1
La aparición de heces u orina fuera de la bandeja puede indicar que su gato no se encuentra a gusto con ella. Revise los factores de confort que hemos comentado anteriormente. En caso de que sean los adecuados, consulte a su veterinario por si el motivo fueran causas orgánicas (generalmente, problemas del aparato urinario).
La presencia de orina fuera de la bandeja puede deberse también a la aparición de conductas de marcaje por diversos motivos, especialmente relacionados con el estrés y la madurez sexual. Su veterinario le podrá dar algunas pautas para eliminar o reducir esta conducta, siendo la esterilización la primera opción en el caso de que aún no lo estuviera.
Cuidados gatos: Juego y enriquecimiento ambiental
El enriquecimiento ambiental consiste en mejorar su bienestar, tanto físico como psicológico, identificando y proporcionando estímulos ambientales necesarios para optimizar su calidad de vida.
En los gatos, el juego es la base de su socialización y constituye un sensor de bienestar puesto que desaparece en los animales enfermos o cuando están en entornos inadecuados.
Les encantarán aquellos juegos que simulan la caza de presas pequeñas, objetos a los que pueda darle zarpazos y lugares en los que pueda jugar a esconderse (cajas y bolsas de papel).
Es mejor no utilizar las manos o cualquier otra parte del cuerpo en ellos, ya que aprenderá que está permitido morderlos y arañarlos.
Proporciónale juguetes adecuados, asegurando que, por su tamaño, no le será posible tragarlos.
Busca juguetes “interactivos”, es decir, que respondan al juego del gato: que hagan ruido cuando se muerden, que puedan rellenarse con alimento que suelten poco a poco, que tengan aspecto de ratoncillos con catnip o cascabel para seguir, varitas con juguetes colgados al final que se pueden fijar al suelo o a la pared, etc.
También pueden usarse pelotas para lanzar, juguetes con cuerdas para perseguir, peluches para “pelear”, etc.
Lo mejor es reservarle 15-20 minutos varias veces al día, para dedicarlo a jugar con él: al menos un rato antes de irse a trabajar, otro un poco después de volver, y otro a última hora de la noche.
Si durante el juego observa que el animal se excita, y le “ataca” con uñas o dientes, interrumpa el juego y espere a que se calme antes de continuar con él. Nunca pegue a su gato, sólo conseguirá que éste le coja miedo, y que sea más difícil de tratar.
Tienen una tolerancia limitada a las caricias, por lo que es necesario aprender a detectar los signos de inquietud (acicalamiento compulsivo, orejas hacia atrás o movimiento rápido de la cola) para desistir del contacto y evitar problemas.
Nunca debe forzarse la interacción con un gato que muestre una postura ofensiva, ni tampoco cuando presente síntomas de miedo.
Más info sobre enriquecimiento ambiental en gatos: http://www.etologiaveterinaria.net/enriquecimiento-ambiental-en-gatos/
Cuidados gatos: Salud y medicina preventiva
En la mayoría de los casos, el gato recién adquirido ha sufrido bruscos cambios en un corto espacio de tiempo. La llegada a su nuevo hogar se suma a todo ello, lo que hace que este periodo de estrés le haga más susceptible a la aparición de enfermedades.
Es aconsejable que tu animal visite al veterinario que a partir de ese momento cuidará de su estado de salud durante el resto de su vida. Trasládale toda la información de que disponga sobre vacunaciones, desparasitaciones, pruebas diagnósticas, etc. de las que tenga conocimiento, y le aconsejará debidamente sobre los pasos a seguir a partir de ese momento.
La desparasitación es fundamental en los gatos desde que son cachorros y durante toda su vida. En animales jovenes y/o recogidos de la calle es habitual encontrar ácaros en las orejas que provocan malestar y picor. Tambien es habitual que tengan parásitos intestinales, por eso es necesario acudir al veterinario para que nos aconseje en este aspecto sobre lo mejor para nuestro animal y establecerá el protocolo a seguir según cada caso. Aunque no salgan de casa es importante desparasitarlos internamente cada cierto tiempo.

Con carácter general, si el animal sale de casa habitualmente, se debe cuidar la desparasitación externa del animal para evitar pulgas y garrapatas.
El gato en general es un animal muy sensible a los virus. Existe una gran variedad de virus que afectan al gato y algunos de ellos los podemos evitar mediante la vacunación. Las vacunas más empleadas actúan frente a rinotraqueitis, calivirus, panleucopenia felina (trivalentes) y leucemia felina.
La primovacunación de un gatito comenzará a partir de las 8 semanas de edad con los recordatorios posteriores que sean necesarios bajo criterio veterinario, generalmente dos dosis. La vacuna de leucemia puede ser aplicada en aquellos animales cuya previa prueba frente a leucemia e inmunodeficiencia felina (FeLV-FIV) sea negativa. No se debe vacunar gatos sin testar previamente frente a leucemia.
Es importante recordar que en la Comunidad de Madrid es obligatoria la implantacion de microchip a partir de los 3 meses de edad. La vacunación antirrábica, a diferencia de los perros, no es obligatoria en esta Comunidad.
Algunos síntomas que podemos detectar y que requiere atención veterinaria:
- Tiene vómitos o babeo excesivo.
- Tiene diarrea o heces con sangre, con o sin moco.
- Tiene legañas, mocos y/o estornuda mucho.
- El gato deja de comer o come menos.
- Tiene dificultad para respirar o ataques de asma.
- Tiene calvas redondas, heridas en la piel, alopecia, mal olor …
- Tiene las orejas caídas, o heridas detrás de las orejas.
- El gato ha dejado de lavarse.
- Ha dejado de saltar o se queja al hacerlo o al tocarle alguna zona especial.
- Se lava compulsivamente una parte de su cuerpo.
- Orina fuera de su bandeja, en superficies horizontales.
- Al orinar, maúlla o abre mucho la boca, síntomas de dolor.
- Va mucho a orinar pero orina poca cantidad.
- Se vuelve torpe, camina pegado a la pared de casa, se cae.
Cuidados gatos: Esterilización ¿SI O NO?
Esterilización ¿En qué consiste?
Se trata de una intervención quirúrgica sencilla en machos y poco complicada en hembras (al ser una técnica habitual en la mayoría de los centros veterinarios), que se realiza con anestesia general y que consiste en la extracción de los órganos reproductores.
¿Por qué se hace?
Elimina el celo y previene la llegada de camadas no deseadas, disminuyendo por tanto el número de animales abandonados.
Evita en unos casos y ayuda a controlar en otros, algunos problemas orgánicos (embarazos psicológicos, piometras, tumores de mama, quistes ováricos, hiperplasia prostática, tumores testiculares …) y de conducta (marcaje, agresividad …)
Recuerda que en el caso de gatos que permanecen habitualmente en casa, la convivencia con animales no castrados (tanto hembras como machos) puede ser muy complicada, dadas las conductas no deseadas que desarrollan relacionadas con su actividad sexual.
En el caso de animales que pueden salir al exterior, es posible que los problemas sean aparentemente menores, pero lo más probable es que nuestra hembra se quede preñada, y como consecuencia tengamos una camada no deseada que de una u otra manera pueda incrementar el problema de los gatos abandonados, haciéndonos directamente responsables de él.
En el caso de los machos, aumentará su tendencia al vagabundeo y el riesgo de verse implicado en peleas y accidentes.
¿Cuando hacerlo?
Se recomienda realizarla a partir de los 6 meses de edad del animal tanto en machos como en hembras. No es necesario que las hembras queden gestantes alguna vez antes de esterilizarlas.
¿Cambiará mi animal después la intervención?
Los animales esterilizados no presentan cambios de carácter ni se vuelven más apáticos. No es necesario que las hembras tengan al menos una camada para realizarla.
Si lo que le preocupa es que su animal engorde tras la intervención, tenga en cuenta que una alimentación adecuada y ejercicio suficiente mantendrán a su mascota estilizada y en forma.
Por estas razones, la esterilización de los gatos domésticos está absolutamente recomendada, ya que facilita enormemente la convivencia con ellos, aumenta su esperanza de vida, y contribuye al control del número de gatos sin dueño.